Las plagas y las enfermedades en el jardín son un tema de especial cuidado. Si queremos tener nuestras plantas saludables y hermosas debemos monitorear constantemente la presencia de visitantes indeseados que puedan ocasionar daño en hojas, raíces y flores.
Pero antes de empezar debemos hacer conciencia para cambiar una costumbre bastante arraigada en nuestra cultura y es la de fumigar “por si acaso”. Debemos entender que la aplicación de químicos para el control de plagas solo debe realizarse cuando haya presencia comprobada de éstas y no solo por la costumbre, así como nosotros los humanos no nos tomamos un antibiótico sin tener necesidad de él. Es importante tener en cuenta que los productos químicos pueden tener efectos negativos sobre la planta y sobre quienes estamos alrededor de ellas. Además, debemos pensar que los plaguicidas controlan tanto los insectos buenos como los malos y es importante contar con aliados naturales en el jardín.
También es fundamental antes de correr como locos a aplicar productos de control, IDENTIFICAR QUÉ TIPO DE PLAGA TENEMOS y qué queremos combatir. Por ejemplo, si tengo pulgón que es un insecto, debo aplicarle un insecticida, pues de nada me va a servir aplicarle un fungicida o un bactericida, así como no va a tener efecto que yo me tome un medicamento contra la acidez estomacal, si lo que tengo es un dolor de cabeza.
Tercero, antes de pensar en aplicar cualquier producto químico convierte en parte de tu rutina de cuidado de tus plantas, el manejo integrado de plagas. ¿En qué consiste? El manejo integrado de plagas se refiere a todos los pasos que debo seguir para mantener mis plantas saludables y cómo puedo controlar las plagas antes de llegar a la aplicación de químicos fuertes. ¿Entonces cuáles son los pasos?
1- Selecciona bien tus plantas:
Existen plantas que son propensas al ataque de ciertas plagas. Por esto debes tener cuidado al momento de elegir qué plantas quieres combinar pues si tienes una planta que es propensa a ciertas plagas y esta se infecta es probable que las demás plantas también lo hagan.
2- Buen manejo / buenas prácticas agrícolas:
Es decir el correcto manejo de la planta, esto incluye el riego, la fertilización, la ubicación, la cantidad de luz que recibe etc. En las plantas al igual que en los humanos, las enfermedades son mayores en organismos débiles y sin capacidad de respuesta, es por esto que una planta bien nutrida y bien cuidada es menos propensa al ataque de plagas y enfermedades.
3- Control mecánico:
Es decir si veo plaga localizada en una hoja o en un punto específico puedo retirarla y así evitar que se propague por toda la planta. Igualmente es fundamental retirar material enfermo o deteriorado antes que este se convierta en foco de enfermedad.
4- Control biológico, control con productos inocuos para la salud humana:
Existen muchos insectos depredadores y benéficos, así como muchos productos de uso diario que pueden controlar las plagas sin riesgo para la salud. Por ejemplo: Las mariquitas, las crisopas, las avispas depredadoras, los ácaros depredadores, las libélulas, las tijeretas entre muchos otros insectos se alimentan de las plagas y son unos aliados excelentes para el jardín. Igualmente, productos como el jabón potásico e incluso el jabón disuelto en agua pueden aplicarse y actúan sobre las plagas, controlándolas.
5- Como último recurso y si nada más me funciona, puedo buscar un producto adecuado para controlar la paga específica que ataca mis plantas.
Entonces finalmente, si la opción es la aplicación de productos químicos, escoge el producto con el tipo de acción que necesites. ¿Como así?
Si, existen productos sistémicos y existen productos que actúan por contacto. Los productos sistémicos son absorbidos por las plantas y la vuelven “tóxicas” para la plaga que queremos controlar, es decir que actúan tanto cuando entran en contacto con la plaga como cuando esta intenta alimentarse de la savia, logrando así, un control más completo. Los productos de contacto solo actúan, como su nombre lo indica, por el contacto con la plaga, ya sea porque logremos aplicar el producto sobre ella, como porque la plaga al moverse entre en contacto con el producto, pero si hay superficies de la planta que no quedan saturadas y la plaga se esconde en ellos, este tipo de plaguicidas no logrará ser un control efectivo.
Entonces, ahora sí…. ¿y cómo sé que plaga tiene mi planta?
Te dejamos a continuación la descripción de algunas de las plagas más comunes, información de cómo identificarlas y finalmente como controlarlas.
INSECTOS DAÑINOS COMUNES:
Las plagas que presentamos a continuación son todas INSECTOS, es decir que se controlan con productos insecticidas.
Pulgón o áfidos:
Producto: Insecticida de contacto
Dosis: Según recomendaciones del producto
Frecuencia: Según recomendaciones del producto
El pulgón o áfido es un Insecto chupador que succiona la savia de la planta y en casos extremos puede causar su muerte. Son insectos pequeños pero visibles a simple vista. Generalmente se encuentran en los brotes tiernos, en las hojas nuevas o en el envés de la hoja y usualmente están en grupos.
Pueden ser de color verde, café, negros e incluso amarillos y cambian de color a medida que crecen. Sus depredadores naturales son las mariquitas, las crisopas y algunas avispas.
Cuando hay presencia de pulgón es común encontrar:
– Superficies pegajosas
– Brotes nuevos entorchados o deformes
– Amarillamiento y muerte prematura de hojas.
– Presencia de hongos negros sobre las hojas (fumagina)
Cochinilla Algodonosa
Producto: Insecticida Sistémico
Dosis: Según recomendaciones del producto
Frecuencia: Según recomendaciones del producto
Aunque existen varios tipos de cochinillas, la cochinilla algodonosa es la más conocida y tal vez una de las plagas más odiadas en el mundo entero. Este insecto chupador se caracteriza por una cobertura blanca y cerosa que llevan constantemente en su espalda y que la hacen fácil de identificar.
Generalmente se ubican en las bases de las hojas, en los pliegues junto al tallo y en los brotes nuevos y aunque son pequeñas se pueden identificar a simple vista.
Las cochinillas se alimentan de la savia de las plantas, y en grandes concentraciones pueden llegar a afectar severamente la planta e incluso a matarla.
Controlarla puede ser complejo debido a que su cobertura cerosa las protege en cierta medida de la mayoría de los productos y evita que los químicos entren en contacto con el insecto. Es por esto que para tratar este insecto se recomienda el uso de productos de acción sistémica en dosis y frecuencias altas que eviten la reproducción masiva de la plaga.
Cuando hay cochinillas generalmente se encuentra:
– Superficies pegajosas por las excretas de azúcar de la cochinilla
– Debilitamiento de la planta
– Poca o nula floración
– Grupos de huevos en el envés de las hojas
– Presencia de hongos negros sobre las hojas (fumagina)
– Presencia de hormigas
Escamas:
Producto: Insecticida Sistémico
Dosis: Según recomendaciones del producto
Frecuencia: Según recomendaciones del producto
Las escamas son especies de cochinilla y vienen en diferentes formas y colores. Aunque generalmente son inmóviles y no lo parezcan, también son insectos chupadores de savia y pueden generar problemas bastante serios.
Las escamas se asemejan a pequeñas costras, generalmente de color café (aunque hay de otros colores), con un poco de relieve y tamaño pequeño pero reconocible a simple vista.
Es fundamental controlarlas de manera temprana y evitar infestaciones
Cuando hay escamas generalmente se encuentra:
– Escamas visibles en los tallos jóvenes
– Plantas débiles
– Cortezas agrietadas
– Ramas muertas
– Hojas amarillas
ARACNIDOS
A continuación, presentamos los ácaros. Esta plaga NO es un insecto y se controla con productos acaricidas.
Ácaros:
Producto: Acaricida
Dosis: Según recomendaciones del producto
Frecuencia: Según recomendaciones del producto
Los ácaros ¡NO SON INSECTOS!
Los ácaros son arácnidos, es decir arañas, que se alimentan de la savia de las plantas y que pueden llegar a causar estragos en ellas. Su tamaño es diminuto, tanto que son casi imposibles de observar a simple vista. Generalmente se ubican debajo de las hojas y en los brotes tiernos.
Cuando hay ácaros se encuentra:
– Presencia de telas de araña diminutas en hojas y tallos
– Hojas entorchadas, arrugadas y deformes
– Hojas nuevas deformadas
– Hojas con manchas y puntos
– Pérdida de hojas
HONGOS
Hongos dañinos comunes:
Producto: Fungicida
Dosis: Según recomendaciones del producto
Frecuencia: Según recomendaciones del producto
Existen muchos hongos que pueden ser dañinos para nuestras plantas y llegar a enfermarlas. Algunas de las enfermedades más comunes son botritis, roya, antracnosis, mildew… entre muchas otras.
Para cada una de estas enfermedades los síntomas pueden ser varios y bastante diversos, incluyendo manchas negras pequeñas y redondas en las hojas, manchas necróticas, manchas que se van extendiendo por todas las hojas, manchas negras, grises o rojizas en los tallos, ennegrecimiento de las venas de las plantas… entre muchos otros.
Por lo general los hongos proliferan cuando:
– Hay exceso de humedad en el ambiente
– Hay un riego excesivo
– En espacios cerrados, sin ventilación
– No se hace manejo cuando se observa su presencia
Babosa y caracoles
Producto: Molusquicida “matababosa”
Dosis: Según recomendaciones del producto
Frecuencia: Mientras se observe la presencia de la plaga.
Las babosas y los caracoles pueden generar daños estéticos al masticar las hojas nuevas de nuestras plantas, y daños mayores pues pueden ser vectores de enfermedades como hongos y bacterias, al moverse de planta en planta. Aunque sus daños son fácilmente reconocibles y su rastro claramente visible, para observarlos puede ser necesario una revisión en las horas de la noche que es cuando están activos.
Las babosas y los caracoles, prospera en ambientes húmedos y oscuros, por lo que es importante evitar el exceso de humedad y controlar el riego.
Existen productos que los eliminan y que pueden ser útiles en muchos casos, pero antes de aplicarlos es fundamental leer los ingredientes del producto y tener las precauciones necesarias, pues en su mayoría estos productos son elaborados a base de metaldehído, el cual es extremadamente tóxico y puede ser peligroso (e incluso mortal) si se ingiere. Por esto si se aplica es necesario tener en cuenta que quede fuera del alcance de niños y mascotas.
Cuando hay babosas se observa:
– Hojas con huecos / masticadas
– Tallos y hojas jóvenes comidas
– Rastros brillantes de “baba”
– Huevos (bolitas transparentes)